jueves, 8 de diciembre de 2011

Nota informativa sobre la charla de Javier Couso en el Centro de Estudios 15M

El jueves 7 de diciembre a las 12 del mediodía y en el salón de grados de la Facultad de Filosofía de la UMU, se celebró una charla organizada por ASEFI y el Centro de Estudios 15M y protagonizada por Javier Couso, hermano de José Couso, periodista asesinado en Irak por tropas norteamericanas durante la ocupación de Bagdad.

Durante la charla, Javier Couso informó de los últimos avances en el proceso judicial abierto contra los asesinos de su hermano. Así, comentó el auto del juez Santiago Pedraz por el que procesa a los soldados protagonistas del crimen e imputa a dos altos mandos del ejército norteamericano implicados en el mismo. En el auto, el juez considera probada la existencia de un plan elaborado por las fuerzas norteamericanas para aterrorizar a los periodistas y evitar que cubriesen los momentos de la entrada y ocupación de la capital. Ejecutando ese plan, el ejército de EEUU bombardeó sedes de medios como Al Jazeera y el hotel donde se alojaba la prensa, lugar donde murió José Couso. Todos los objetivos bombardeados estaban plenamente identificados como sedes de la prensa internacional, y el tanque norteamericano que asesinó a Couso contaba además con los visores de última tecnología precisos para comprobar sin lugar a dudas que quien les grababa desde la ventana del hotel no era un miliciano, sino un reportero.

Estando probado el crimen y existiendo normas jurídicas nacionales (el art. 611 CP) e internacionales (la Convención de Ginebra) que le imponen severas penas, los gobiernos de Aznar y Zapatero, mediante la fiscalía general del Estado, y siguiendo órdenes de EEUU tal y como revelan los documentos de Wikileaks, intentaron por todas las formas encubrir a los militares responsables del asesinato, ralentizando e intentando cerrar el proceso mediante constantes recursos de la fiscalía, en los que ésta reclamaba la no imputación de los criminales. Pese a ello no han podido evitar que el juez Pedraz les procese.

En otro orden de cosas, Javier Couso reflexionó sobre el neofeudalismo hacia el que hoy se dirigen las relaciones internacionales y las políticas nacionales, un sistema donde el poder económico sustituye a la voluntad popular y anula los Derechos Humanos, anteponiéndose la satisfacción de los intereses espurios de banca y grandes empresas al respeto hacia la dignidad humana. Del mismo modo que los gobiernos de Aznar y Zapatero encubrieron y protegieron a los asesinos extranjeros de un ciudadano español que arriesgaba su vida para salvaguardar nuestro derecho a la información, el gobierno actual obedece ciegamente las órdenes de los amos económicos de Europa, aunque su ejecución implique privar a la ciudadanía de los derechos que la propia Constitución les reconoce, incluido el derecho a decidir en primera persona sobre cuestiones vitales para su futuro, como lo fue la reforma constitucional.

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