10 de diciembre de 2011, día internacional de los derechos humanos
Manifiesto De Derechos Humanos
La Comisión de derechos humanos de la Facultad de Trabajo Social de la Universidad de Murcia (UMU), El Foro Ciudadano, La Comisión 8 de Marzo, El Foro Social , la Coordinadora de ONG de la Región de Murcia (CONGD), el Centro de Estudios 15M, y demás organizaciones, instituciones y personas abajo firmantes, con ocasión del Día Internacional de los Derechos Humanos y con el propósito de defenderlos en la amplitud que hoy les corresponde, de promover su extensión universal y de reivindicar su fuerza vinculante,
Manifestamos
Que la actual crisis global nos ofrece una oportunidad histórica de transformación, una ocasión única para redefinir el modelo de desarrollo económico mundial, en aras de la defensa del derecho a la paz y el derecho a la vida de los 7 mil millones de seres humanos que habitan nuestra Tierra, y dejar un mundo mejor para las generaciones futuras.
Para ello es necesario que los poderes económicos y políticos actúen en el marco de la justicia social y ecológica, y el desarrollo de los derechos humanos desde la profundidad de la ética y la unión con la vida.
Lo contrario, someter los intereses de la humanidad y el planeta a un modelo económico que genera pobreza, destruye nuestro ecosistema y fomenta la guerra, es consentir una crisis de la representación política. Queremos decir alto y claro que a quienes representan son a todos los ciudadanos y ciudadanas del planeta quienes quieren construir un mundo mejor que el que han encontrado. La respuesta ciudadana tiene que ser lo más amplia posible, porque somos las personas las que sabemos que vale la pena optar por otro modelo de vida y de acción. Y desde esta base social amplia reclamamos:
1) El derecho a la paz, lo que implica que todo lo que sirva para hacer la guerra debe desaparecer, y desarrollar y fomentar la cultura de la paz. Sólo la paz puede garantizar de manera real y efectiva el bienestar de la Humanidad sobre la Tierra que la sustenta, por ello el imperativo para que el Desarrollo Humano pueda avanzar hacia una sociedad sostenible y solidaria es acabar con la amenaza de la guerra, de las armas, y de todo tipo de violencia, también la ejercida por la estructuras sociales injustas.
2) El derecho a vivir, que implica no sólo el derecho a la supervivencia sino también a la libertad de disfrutar de la vida de todos los seres humanos, y que lleva consigo necesariamente el derecho a la propia idea de dignidad. El derecho a un "trabajo decente", en un marco regulador, con la participación de la clase trabajadora, que garantice condiciones de libertad, igualdad, seguridad, protección social y dignidad humana.
3) La quiebra del sistema de dominio al que estamos sometidos, rompiendo su legitimidad, porque no actúa a favor del bienestar y el futuro de la humanidad, sino que genera pobreza e inventa y financia guerras en nombre de la democracia y los derechos humanos. Se distorsiona así la lógica más elemental de los DDHH que es la protección de la vida de la humanidad y del planeta que la sostiene.
4) El protagonismo y la participación ciudadana, porque los cambios los realizan las personas y los movimientos sociales, capaces de gobernar la diversidad que es nuestra gran riqueza, mediante experiencias de participación popular que rescatan el sentido humano de la vida pública, y que actúan en un mundo complejo, diverso y plural.
5) La soberanía de los pueblos para la construcción y el fortalecimiento del Estado, que reoriente la economía y la política hacia la creación de un espacio de paz y de libertad para todos, lejos de la sumisión actual ante los mercados y las bolsas, priorizando la protección a las personas y los sistemas de protección social y ecológica.
6) El avance en la adopción de un régimen mundial que nos permita detener el calentamiento global, logrando que los acuerdos en la negociación climática internacional ocupen un lugar prioritario en las agendas políticas de todos los países.
7) El compromiso conjunto de la eliminación de la violencia contra las mujeres y el fin de la discriminación por orientación sexual o identidad de género. El mundo actual necesita del desarrollo y el empoderamiento de las mujeres, para que libres del régimen de dominación patriarcal, puedan ofrecer su esfuerzo original a la construcción de un mundo más justo para todos.
Desde la conciencia ciudadana de un mundo en peligro manifestamos que la democracia debe revivirse en cada nueva generación y que ha de garantizar unos derechos básicos para toda la humanidad. Reducir la democracia a la salvaguarda de un modelo económico que permite destrucción de empleo, de servicios públicos, de derechos sociales, de derechos ecológicos, con el fín de pagar la deuda contraída por los Estados, y hacer a las personas y a los pueblos, partícipes de este crecimiento insostenible, es una contradicción y un grave error.
Por eso la ciudadanía activa quiere deslegitimar al poder político que ya no la representa, porque el Estado de derecho, la democracia, se deslegitima cuando se desvincula del compromiso original con los derechos básicos de los seres humanos y los derechos de la Tierra que nos acoge. Y por eso nosotros, como parte de esa ciudadanía activa reclamamos los derechos humanos como instrumentos de paz y como exigencias materiales de justicia, y así queremos reivindicarlo con este manifiesto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario